Es tan sencillo, que parece complicado.

Hace unos días tuve un sueño en el que aparecía una persona a la que le tenía mucha confianza, pero que ahora ya no es parte de mi vida cotidiana. En el sueño, estábamos sentados en unas piedras enormes, frente al mar. Estábamos físicamente uno al lado del otro, pero yo sentía una distancia abismal entre los dos. Desperté algo atolondrada, pero sabía porqué había soñado eso.

Hay amigos a quienes dejamos ver nuestro interior, todos tenemos por lo menos uno (o deberíamos), ésa o ése que nos conoce bien, con quien nos atrevemos a bajar el escudo y que permitimos que nos vea tal cual somos. Esa persona no juzga, sólo escucha y tal vez aconseja cuando es necesario, pero en todo momento te acepta, te quiere y sabe que puede contar contigo de igual manera.

Pero qué pasa cuando esa persona, por la razón que sea, empieza a sentirse superior a ti, mejor que tú y por lo tanto, empieza a juzgar tus decisiones, a señalar todo lo que haces mal, a decirte cómo debes llevar tu vida y qué cosas tienes que hacer para ser “mejor”.

Lo viví y en su momento, como era de esperarse, me sentí ofendida y me puse en modo defensivo (el ego no aguanta demasiado). Una vez superado el enojo, llegue a pensar que mi amigo tenía razón, pero después de un tiempo me di cuenta de que todo lo que me decía eran puras pendejadas (pardon my french). De pronto, ya no era el amigo a quien tanto quería y con quien podía ser yo, con mis defectos, virtudes, manías, etc. Se convirtió en un ser extraño, como si áquel que conocía tan bien (eso creía) dejara de existir.

Pienso que mi amigo simplemente se siente vacío y busca llenar ese hueco (que en realidad no existe) con cosas que lo emocionan en el momento pero que después de un tiempo, ya no lo llenan, además de tener un pavor increíble a estar solo. Tiene una imagen grandiosa de sí mismo, basada en cosas que realmente son tan vacías como lo que él siente dentro de sí. Puedo estar equivocada, pero es lo que siento.

Las personas que no se aguantan a sí mismas, siempre están buscando cosas que hacer. No pueden salir a caminar y ver el paisaje, o sentarse en una banca y ver pasar a la gente o admirar su entorno. Viven como frijoles saltarines, sin ton ni son, siempre buscando llenar un hueco que es imposible de llenar porque NO EXISTE.
Todo lo que necesitas esta dentro de ti, la fuerza no se busca fuera, ya esta dentro de ti y lo que tienes que hacer es dejarla salir. Mi amigo me decía que todo lo que hace es para verse fuerte, para que la gente lo vea y diga, mira que “cool” es, que interesante, vamos, busca admiración. Y lo curioso es que él mismo me dijo una vez que yo tenía que dejar de buscar la admiración de las personas que quiero, ¿lo pueden creer? Pero así pasa, lo vemos en los demás, pero no lo vemos en nosotros mismos.

Lo que ahora sé es que, si vas a aventarte de un avión con paracaídas, si quieres escalar la montaña más alta, si quieres apender ninjitsu, o cualquier otra cosa que se te ocurra, hazlo porque es divertido, hazlo porque quieres sentirlo, vivirlo plenamente, pero no porque eso te hará sentirte superior a los demás y mucho menos para ser admirado

Nadie es superior o inferior a ti. Cuando te sorprendas sientiéndote inferior o superior a alguien, recuerda que no es verdad. Todos somos importantes, nadie es menos, nadie es más.